jueves, 19 de junio de 2008

EDUCAR CON "INTELIGENCIA"


Conversación esperando al comienzo de una sesión cualquiera de una Escuela de Madres y Padres cualquiera:

-"No podemos echar broncas, no podemos soltar de vez en cuando un sopapo,no podemos castigarles,...¿qué nos queda entonces?"

-"Que no, que lo importante es enseñar con el ejemplo".

"Ya. Y ahora hay que hacer una carrera, para educar con la "inteligencia" esa. Que no todo el mundo ha podido tener estudios".

"No. Esa inteligencia no es la de lograr mucha información y retenerla a base de mucha memoria. Se trata de la Inteligencia Emocional".

"Buf. ¿Y de eso tenemos?"

Para saberlo, Elías, Tobías y Friedlander (gente entendida en esto) nos ofrecen una regla que refleja con exactitud (según esa gente) lo que se entiende por educación emocionalmente inteligente: "Trate a sus hijas y a sus hijos como le gustaría que les tratasen el resto de las personas".
Esta regla, por lo visto contiene cinco principios que son una adaptación de las Cinco Competencias de la Inteligencia Emocional:

1.-Sea consciente de sus propios sentimientos y de los sentimientos de las demás personas.
2.-Muestre empatía y comprenda los puntos de vista de las otras personas.
3.-Haga frente de forma positiva a los impulsos emocionales y de conducta, y regúlelos.
4.-Plantéese objetivos positivos y trace planes para alcanzarlos.
5.-Utilice las dotes sociales positivas a la hora de manejar sus relaciones.

-"Es decir, que si no cumplimos esos cinco principios, nuestra forma de educar no es emocionalmente inteligente...¿hay alguien que los cumpla?

-"Supongo que como siempre pasa en estos casos, eso será algo hacia lo que aspirar".

-"Pero es que así sin más... eso requiere más explicaciones".

-"Que tendrán que darnos en las siguientes sesiones".

-"¡Ah, bueno! Y mientras, ¿no pueden dar alguna pista más?"

-"Pues sí. Hablan de unos pasos que dar, a modo de sugerencias para tratar a nuestras hijas y a nuestros hijos:

.crear una familia afectuosa y capaz de compartir y de resolver problemas;
.hablar de forma que su hija,su hijo, piensen;
.conseguir que actúen con menor impulsividad y aumenten su autocontrol y aptitudes sociales;
.fomentar el autodominio y la mejora personal";.

-"¡Madre mía! Creo que lo de la Inteligencia Emocional es más difícil que lo de la otra inteligencia, la de toda la vida. Con lo fácil que es enseñar quebrados y sumas y restas, o tenerles un par de horas leyendo cualquier cosa, que dicen que es tan bueno."

domingo, 15 de junio de 2008

¡¡¡GRAN PARÓN FORZOSO!!!


¡Buff! ¡Cuánto tiempo!
Final de curso universitario, con trabajos y exámenes que corregir, unido a otras complicaciones y a unos problemas físicos bastante dolorosos han dado como resultado semanas de inactividad forzosa.

Hoy puede ser el primer día de la vuelta a la "normalidad" (¿?) Tener bajones, momentos más duros y complicados, ¿no forma parte de la normalidad?

Tendré que pensar que el texto que a continuación comparto estaba esperando su momento, pues llevaba junto al ordenador varias semanas,y es ahora cuando le encuentro todo el sentido:


"Toda persona debería crecer con la convicción de que no es una tragedia ni una catástrofe cometer un error.. El arte más difícil no es el de no caerse nunca, sino el de saber levantarse y seguir el camino emprendido.
Las personas educadas para la perfección se pegan luego topetazos que les dejan hundidas para largo tiempo.
La gente que se dedica a la pedagogía dicen por eso que es preferible permitir a una criatura que rompa alguna vez un plato y enseñarle luego a recoger los pedazos porque "es mejor un plato roto que una criatura rota".
Sería estupendo educar a la juventud en la idea de que no hay una vida sin problemas, pero también en la de que en toda persona hay capacidad para superarlos.
No vale la pena llorar por un plato roto. Se compra otro y ya está. Es más grave que se rompa un corazón".
(texto adaptado.

De vuelta a la normalidad de caídas y vuelta a levantarse, un fuerte abrazo para ti y toda tu familia. De todo corazón.