martes, 28 de octubre de 2008

"FRIEGO LUEGO EXISTO" Y LA EDUCACIÓN (COEDUCACIÓN)

Un momento de respiro tras el maratoniano y largo fin de semana. El pasado jueves, dentro de las diversas jornadas organizadas por Emakume Txokoa de Arrasate-Mondragón, participé como ponente presentando "Friego luego existo", junto a Xabier Odriozola, coordinador de las Asociaciones de Hombres, que desarrolló el tema de las nuevas masculinidades. Tras nuestras intervenciones hubo un coloquio entre todas las personas asistentes muy interesante. Enriquecido más aún por la asistencia de un número inusual de hombres que participaron activamente en la charla.
Desde aquí mi felicitación y agradecimiento. Sé que el proceso no va todo lo deprisa que muchas quisieran, pero se van haciendo cada vez más cosas.
Al día siguiente de madrugada fuimos a Valdemoro (Madrid)donde me habían invitado a hablar sobre educación junto a un grupo de mujeres que se preparan para trabajar con criaturas en centros escolares. Un grupo lleno de ilusión y ganas por ayudar a que este mundo sea más acogedor para las niñas y los niños que están empezando a conocerlo. En tan buena compañía, el tiempo se nos pasó sin darnos cuenta. Un abrazo para todas, Elvira, Elena, Petra, Santa,... y ánimo. "Friego luego existo" ocupó un pequeño espacio como referente de una coeducación entendida desde los primeros momentos, donde madres y padres deben ser protagonistas en la misma medida y a todos los niveles.
Por la tarde (y al día siguiente) participamos en la Feria del Libro de Getafe (Madrid), donde pudimos tener conversaciones sorprendentes y enriquecedoras con algunas de las personas que se acercaron hasta las casetas. Gente interesada por cuestiones como la verdadera igualdad entre las personas y la lucha por acabar con los roles sexistas establecidos. Aprovechamos ese interés. Creo que algo quedó.
De vuelta a casa seguiremos en la brecha. Hay mucha gente esperando el cambio, y cada vez son más las personas empeñadas en conseguirlo.
Como son más los hombres que entienden que ese cambio enriquece tanto a las mujeres como a ellos. Hombres que son conscientes de todo lo que se han perdido por culpa de los dichosos roles y estereotipos sexistas. Y se alegran y arriman el hombro.
Nos alegramos... y seguimos arrimando el hombro.

miércoles, 22 de octubre de 2008

INTELIGENCIA PARA ACEPTAR SUGERENCIAS (vengan de quien vengan)




Carta de una criatura a madres y padres del mundo:

No me déis todo lo que os pido, porque a veces ni yo mismo sé muy bien qué es,
pero cuando no me lo déis decidme por qué.
No me gritéis. Os respeto menos cuando lo hacéis y me enseñáis a gritar a mí también.
Y yo no quiero hacerlo.
No me déis siempre órdenes.
Si en vez de órdenes, a veces me pidiérais las cosas, yo lo haría más rápido y con más gusto.
Cumplid las promesas, buenas o malas.
Si me prometéis un premio, dádmelo; si es un castigo, también (pero mejor si no usáis nada de eso).
No me comparéis con nadie, especialmente con mi hermana o mi hermano.
Si me hacéis sentir mejor que otras personas, alguien va a sufrir y si me hácéis sentir peor, seré yo quien sufra.
No cambiéis de opinión tan a menudo sobre lo que debo hacer.
Decidid y mantened esa opinión.
Dejadme valerme por mi cuenta.
Si hacéis todo por mí, nunca podré aprender.
No digáis mentiras delante de mí, ni me pidáis que las diga de vuestra parte, aunque sea para sacaos de un apuro.
Me hacéis sentirme mal y perder la fe en lo que me decís.
Cuando hago algo malo, no me exijáis que diga el por qué lo hice.
A veces ni yo lo sé.
Cuando os equivoquéis en algo, admitirlo y os tendré en mayor consideración. Así me enseñaréis a admitir también mis equivocaciones.
Tratadme con la misma amabilidad y cordialidad con que tratáis a vuestras amistades.
Porque seamos familia no quiere decir que no podamos tener también una relación "amistosa".
No me digáis que haga una cosa que no hacéis.
Aprenderé siempre lo que hacéis aunque no lo digáis.
Pero nunca haré lo que decís que hay que hacer y no lo hacéis.
Cuando os cuento un problema mío, no me digáis "no tengo tiempo para bobadas", o "eso no tiene importancia".
Tratad de comprenderme y ayudarme.
Y queredme. Y decídmelo.
A mí me gusta oíros cómo me lo decís, aunque no creáis necesario decírmelo.
Os quiere
J.J. Brunet (Texto adaptado)

martes, 7 de octubre de 2008

INTELIGENCIA PARA CONOCER "NUESTROS LÍMITES"


En todos los cursos de Escuela de Madres y Padres, en todas las charlas que las Asociaciones Escolares organizan ofreciendo orientación para las familias, hoy en día resulta obligatorio incluir un apartado "importante" en el que se nos den pistas que nos ayuden a inculcar a nuestra criaturas la idea de que deben respetar ciertos límites. Cada vez son más los libros especializados que tratan el tema con claridad y lo que es más importante, dando un ejemplo para cada idea y un remedio para cada situación (ya veo las caras de algunas personas entre ilusionadas y sorprendidas, tras leer esto, preguntando: pero, ¡¿existen esos libros?! ¡¿dónde?!). Qué maravilla ,¿verdad?
Pero como siempre, ante cada aspecto importante que se nos presenta en la apasionante aventura de acompañar en el proceso de crecimiento personal de una persona (nuestra hija o nuestro hijo)que es la educación, siempre nos aparece repetitiva y obstinada la idea de que educamos con el ejemplo y de que nuestro comportamiento influye en su comportamiento. Eso nos lleva a preguntarnos:¿y nuestros límites? ¿Sabemos cuáles son?
Visitando por la red blogs de poesía he encontrado uno donde alguien había escrito en el apartado de los comentarios, una poesía de Jorge Luis Borges titulada "Carta a un amigo". Una poesía que para mucha gente es una maravilla porque capta perfectamente el sentimiento de amor gratuito que supone la amistad verdadera. Amor gratuito que conoce sus límites.
¿Hacemos un juego? Imaginemos que en lugar de "Carta a un amigo" fuera "a mi hija" o "a mi hijo". En ese caso,lo que Forges escribió, ¿valdría igual?. Vamos a verlo.

CARTA A UN AMIGO (carta a mi hija o a mi hijo)

No puedo darte soluciones
para todos los problemas de la vida,
ni tengo respuestas para tus dudas o temores,
pero puedo escucharte y buscarlas junto a ti.

No puedo cambiar tu pasado ni tu futuro.
Pero cuando me necesites, estaré allí.

No puedo evitar que tropieces.
Solamente puedo ofrecerte mi mano
para que te sujetes y no caigas.

Tus alegrías, tu triunfo y tus éxitos no son míos.
Pero disfruto sinceramente cuando te veo feliz.

No juzgo las decisiones que tomas en la vida.
Me limito a apoyarte,
a estimularte y a ayudarte si me lo pides.

No puedo impedir que te alejes de mí.
Pero sí puedo desearte lo mejor
y esperar a que vuelvas.

No puedo trazarte límites
dentro de los cuales debas actuar,
pero sí te ofrezco el espacio necesario para crecer.

No puedo evitar tus sufrimientos
cuando alguna pena te parte el corazón,
pero puedo llorar contigo
y recoger los pedazos para armarlo de nuevo.

No puedo decirte quién eres ni quién deberías ser.
Solamente puedo quererte como eres y ser tu amigo (tu madre o tu padre).

Jorge Luis Borges
Poemas De Amor

¿Qué tal? ¿Qué sensaciones nos produce leerlo desde esa perspectiva? ¿Qué nos hace sentir? ¿Qué sentimientos percibimos cuando nos dirigimos así a las personas que más nos importan?
Se admiten comentarios (animaos, esto sí es importante)